lunes, 27 de abril de 2015

Un lugar

Un lugar olvidado de la ciudad, donde los perros vagabundean pulgosos y los niños corren descalzos por las calles en tierra, donde las madres cuidan a sus hijos con esmero. Un lugar de la ciudad donde los chicos van a la escuela caminando día a día con sus uniformes rotos, donde los hombres se levantan antes que el sol para llegar a sus trabajos. Un lugar de la ciudad donde las noches son más oscuras de lo normal, donde cualquier esquina puede ser peligrosa, donde las historias de tiempos mejores son ya casi un mito. Un lugar de la ciudad donde las jovencitas aún sueñan con príncipes de cuentos de hadas mientras los ancianos miran con nostalgia el atardecer, recordando los sueños de sus hijos perdidos. Ese lugar de la ciudad donde se ven los ladrillos de las paredes, donde todos los techos tienen goteras. En un lugar que los jóvenes sueñan con dejar algún día tras el anhelo de un futuro mejor. Un lugar donde la tensión se respira en el ambiente y el miedo se pasea por las calles. Un lugar de la ciudad donde los extraños son observados tras las cortinas de las ventanas con recelo, es un lugar donde la esperanza, a pesar de todo, permanece en los corazones de la gente buena.


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