Todo final implica un nuevo comienzo y viceversa. Es ese el caso de la situación actual de Highdell, un pequeño pueblo que en su historia ha sido azotado por sequías, guerras y avalanchas, pero que cada vez resurge más fuerte como la mítica ave fénix. Después de la guerra de rebelión, han sido muchas las ciudades las que han tenido que reconstruirse de las cenizas, cientos de personas ahora recorren el reino, desplazados por la violencia y el hambre, buscando un nuevo lugar en el que puedan empezar nuevamente de cero.
¿Qué mejor lugar que Highdell para estos propósitos?, un lugar con tierras fértiles que se cultivan con facilidad y en las cercanías del mar, lo que lo convierte en punto estratégico para los comerciantes de todo el reino. Recientemente se ha podido apreciar como poco a poco el centro poblado de Highdell va creciendo cada vez y como nuevos herreros, carpinteros y posaderos van instalando nuevos negocios. Además, la promesa de la explotación de una mina de plata en las cercanías del pueblo y la construcción de un molino, han llamado la atención de los hombres que buscan trabajo para obtener el sustento diario de sus familias.
Es cierto, Highdell es todavía apenas un pequeño caserío en crecimiento, rodeado de algunas fincas y campos de cultivo. Pero el crecimiento es notable y es de esperar que en los próximos años se convierta en una importante ciudad.
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