martes, 11 de agosto de 2015

Domingo 15 de Agosto de 2010, antes del mediodía.

Domingo 15 de Agosto de 2010, antes del mediodía.

La llamada de esta mañana era del jefe de redacción del periódico, dudé por un momento pero al final contesté:

– Buen día.
– Buen día, Padre Sebastián ¿Cómo está usted? –Se oyó la voz del otro lado muy entusiasta y alegre–
– Muy bien, ¿A usted cómo le va?
– De maravilla, gracias Padre; que pena ¿Lo interrumpo?
– No, está bien no hace mucho rato me desperté y… –Dudé por un instante, la verdad quería decirle que si– Más bien cuénteme ¿A que debo el placer de su llamada?
– Padre, recibí su escrito ayer, déjeme decirle que está excelente tal vez uno de los mejores que ha enviado para nosotros.
– Sí claro, gracias – ¡Estupideces!… –
– De nada padre, usted sabe que yo valoro mucho la calidad de su trabajo pero… hay algo que preocupa bastante.
– Y ¿Qué es? –Al grano, quería que fuera al grano, odio los rodeos–
– Padre voy a ser directo, disculpe que se lo pregunte así pero ¿Usted no quiere escribir más para nosotros?
– No, no es eso. –No, cómo se le ocurre... ¿Cómo adivinó?– Solo pienso tomarme un breve periodo de descanso del periódico, es que el viaje ha sido muy agotador usted entiende… ¿No?
– Claro, Padre ni más faltaba ¡Está usted en todo su derecho!
– Además también le envié unos cuantos artículos entre los que usted puede escoger, que creo que cubrirán un poco más de un mes de trabajo si tenemos en cuenta los tres anteriores que no han sido publicados aún.
– Es cierto padre, usted sabe que alcanzaran para más de un mes. ¿Sabe? Me gustó mucho el que habla sobre el problema de las drogas, ya que es un tema muy actual, que interesa tanto a jóvenes como a padres y profesores.
– Ah, claro –Fingí haciendo una mueca, a mí juicio ese es el más patético de todos–
– Padre, no siendo más, yo solo llamaba para saludarlo y darle la bienvenida a nuestro país. Espero que tenga unos días de descanso restauradores y verlo pronto nuevamente.
– Claro, más o menos en tres semanas lo llamaré para que acordemos lo de las próximas publicaciones.
– Está bien, Padre. Sería usted muy amable. Muchas gracias.
– Hasta luego, que este usted muy bien.
– Hasta pronto Padre, que tenga usted un muy buen día.
– Muchas gracias, igualmente.

No sé por qué escribo estas cosas sin importancia, en fin, me largo a almorzar.



2 comentarios:

  1. ¬¬ Este capítulo... Este hombre me va a volver loca XD
    En fin, parece que se va a tomar un descanso del periódico, ¿no? Hace bien, porque realmente parece que está agotado...
    Voy al siguiente, a ver si cuenta algo más sobre el innombrable jeje
    ¡Hasta ahora!

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    Respuestas
    1. Es un diario mujer ¿qué esperabas? a veces la gente escribe cosas exasperantes ahí...

      XD

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